Los Diablos Rojos viven uno de sus mejores momentos en la historia del club, momento que tendrán que salir a defender ante su clásico rival, el cuadro curicano que también vive un gran presente.
Un partido con tintes de clásico. Ñublense recibirá a Curicó Unido en partido válido por la decimocuarta fecha del torneo local, este domingo en Chillán. El partido está marcado por ser considerado como «clásico» para ambas escuadras, situación que se arrastra desde aquella final en el 2004. Las autoridades calificaron este encuentro que se disputará en Chillán este domingo a las 20:00 horas, como de «alto riesgo».
Como todo clásico, la semana ha sido especial. En Chillán, los hinchas del cuadro chillanejo hicieron el famoso llamado «banderazo» en Paso Alejo, centro deportivo de Ñublense. Por su parte, Curicó Unido también lo ha vivido de una manera especial, principalmente a través de redes sociales recordando las goleadas de los Albirrojos al equipo de la Región de Ñuble.
A este encuentro, que por la posición de ambos equipos en la tabla de posiciones aparenta ser uno de los más atractivos de la jornada, llegan los Diablos Rojos en la 3° posición con 25 puntos, mientras que los torteros están 4° con 22 puntos. Por lo mismo, este partido es clave para las aspiraciones de ambas escuadras.
Este sábado llegó el plantel de Curicó Unido a la ciudad de Chillán, para concentrar y pasar la noche en la capital regional. Antes de partir de la séptima región, la hinchada curicana se hizo sentir con el apoyo a sus jugadores. Los torteros, de llevarse los tres puntos de visita, se meten de lleno en la pelea por el primer lugar y terminar lo más alto posible esta primera rueda.
Para este partido fueron habilitadas 7.800 entradas, de las cuales 1.000 fueron destinadas para la visita. La autoridad encargada de la seguridad para este clásico, lo definieron como un espectáculo de «alto riesgo».
Fotografía: Bárbara Muñoz/ La Pelota es Mía.