El cuerpo técnico de Nilson Concha y Marcelo Saavedra iniciaron la planificación de una serie de jornadas de entrenamiento gracias a plataformas digitales, a la espera de que el campeonato vuelva en agosto, luego de su postergación.
Hace casi dos semanas, la ANFP informó la postergación del torneo Femenino hasta inicios de agosto, a raíz de la pandemia mundial del covid-19 que registra más de 900 personas infectadas en las regiones de Biobío y Ñuble. Ante esto, los equipos de la zona continúan con los trabajos de cara a la vuelta del torneo que alcanzó a jugarse sólo en una fecha.
Es el caso de la Universidad de Concepción, que logró triunfos en sus dos categorías, y hoy trabaja con una planificación de lunes a viernes para que todas sus jugadoras se mantengan en forma de cara al proceso de cuarentenas voluntarias y obligatorias, que rigen al país. La medida adoptada por los DT’s Nilson Concha y Marcelo Saavedra responde a seguir en contacto con sus dirigidas y el respaldo de la dirigencia a la hora de dar facilidades y ayudas a las jugadoras.
Alejandro Osses, preparador físico de ambas categorías, explicó a La Pelota es Mía que «inicialmente, cuando se suspendieron las clases, y posteriormente vino la suspensión del fútbol, tanto las jugadoras como el cuerpo técnico suspendió los entrenamientos. Se les envió una pauta de trabajo por correo electrónico principalmente para mermar lo menos posible en su entrenamiento, sobre todo para mantener el trabajo que veníamos realizando».
El PF cuenta que se dieron algunas semanas para asimilar la situación actual, todo a la espera de las definiciones que tomara el ente rector del fútbol, con el fin de «no caer en altos niveles de ansiedad, pensando en que esto se produce muchas veces con el encierro, un menor gasto calórico y menos trabajo físico. Por ello, y tras reuniones con el cuerpo técnico se decidió implementar este formato, principalmente porque podíamos ver a las jugadoras realizando los ejercicios y tener un lugar de encuentro que es vital para un deporte de equipo. Así vamos generando nuevos entrenamientos con las niñas, estableciendo de lunes a viernes con un trabajo día por medio para cada categoría, que a su vez se dividirá en dos grupos».
Osses añadió que en cada trabajo participan los directores técnicos, preparadores físicos y en algunos casos con kinesiólogo. «Son cargas que irán en aumento en potencia, pero son totalmente descontextualizadas, sin tanto desplazamiento, porque tenemos espacios pequeños donde están las jugadoras, ya que están en distintos espacios. El secreto es no perder el entusiasmo por parte de las futbolistas; desarrollamos ejercicios para mantener los niveles de fuerza inicial, pero involucraremos para tener mas cargas metabolicas con esfuerzos aeróbicos», complementa.
Finalmente, el profesional explica que todo el proceso «se irá monitoreando con diferentes escalas que ven el impacto del ejercicio, ya que la videollamada no ofrece situaciones presenciales para ir corrigiendo y atendiendo como va sintiendo la jugadora el ejercicio. Además iremos evaluando la fatiga, horas de sueño y dolor muscular después de los trabajos para realizar una ondulación de las cargas de trabajo».
Fotografía: UdeC Femenino