A través de un comunicado, los Diablos Rojos explicaron que la medida busca ajustarse a la realidad país en el marco de la pandemia mundial. Se aseguró que el 70% de los sueldos se pagará con seguros de cesantía y el restante 30% lo cancelará el club tras acuerdo con el plantel.
En tiempos de coronavirus y preocupación, Ñublense dio un paso adelante y tomó los resguardos legales que asegura la nueva ley de Protección del Empleo, y decidió congelar la relación laboral con todos sus trabajadores por al menos tres meses, considerando la para del fútbol desde al menos un mes.
En un comunicado el elenco chillanejo señala que la suspensión temporal de la relación laboral a la que hace alusión el presente comunicado «implica que el trabajador queda eximido de su obligación de prestar al empleador los servicios contratados, liberando con ello a este último del pago de las remuneraciones a contra de la fecha estipulada de suspensión».
El gerente Hernán Rosemblum explicó que «se toma la determinación de proteger sus sueldos. Si bien están haciendo uso de su seguro de garantía, el club le va a entregar un aporte voluntario para que puedan recibir íntegramente sus remuneraciones como lo hacían antes de esta pandemia”.
En diálogo con Radio Futuro añadió que se ha buscado una fórmula que “les permita pasar esta crisis de mejor forma. De otra forma, con el solo ingreso del CDF, no nos alcanza. Necesitamos más para cubrir el sueldo de todos los trabajadores. Creemos que es la forma más idónea para pasar esta crisis”.
Miguel Jiménez, capitán de los Diablos Rojos en tanto dijo que “ya se sabía por donde iba el camino, se estaba esperando la promulgación de la ley, se había conversado con los dirigentes (…) Por fortuna para nosotros, lo que no cubra el seguro de nuestros sueldos, lo va a pagar integro Ñublense, en el fondo vamos a seguir cobrando lo que corresponda del 100% de nuestras remuneraciones”.
Fotografía: Comunicaciones Ñublense