El lateral de Universidad de Concepción, se refirió a la goleada sufrida ante O’Higgins, un rival directo en la lucha por la permanencia.
Un trascendental encuentro tenía hoy el “Campanil”, ya que enfrentaban a “los celestes” que también se encuentran luchando en la parte baja de la tabla. Los dirigidos por Patricio Graff se impusieron con un rotundo 4-1 en el marcador, y el juvenil defensor Leandro Díaz no quedó exento.
“Una dura derrota. No pudimos nunca lograr lo que queríamos. Durante muy pocos pasajes del partido nos logramos encontrar dentro de la cancha”, expresó en conversación con el CDF tras el pitazo final.
En un trabajado primer tiempo, los auricielos abrieron la cuenta con el debut en las redes de Andrés Robles, quien marcó a los 42 minutos. Tras cartón, O’Higgins lo dio vuelta de manera increíble en tan solo tres minutos. “Después del gol que convertimos, fueron 3 minutos de pura desconcentración, lo que no nos puede pasar por la instancia en la que estamos”, analizó Díaz haciendo autocrítica.
De todos modos, los dirigidos por Eduardo Acevedo deben dar vuelta rápidamente la página y pensar en Palestino, a quien visitarán para volver a sumar de tres en la incansable lucha por sostener la categoría. “Vamos a seguir trabajando para salir de la parte incómoda en la que estamos”, reafirmó el ex Fernández Vial que hoy actuó como puntero por la izquierda.
A modo de anécdota, el nacido futbolísticamente en UdeC, tras la salida de Alejandro Camargo por lesión a los 62′, quedó como capitán del equipo por el resto del cotejo. “En los primeros partidos que he podido jugar en primera división por el club, me he sentido bien. Sobre la capitanía, un orgullo para mi, pero, después de la derrota, no hay mucho que disfrutar”, reflexionó respecto a su primer año como profesional en el club.
Para ir hasta la última vez que un canterano de la institución fue capitán, debemos retroceder hasta el 18 de octubre de 2015, donde la jineta estuvo en el brazo de Esteban Flores, en el triunfo 4-1 sobre Universidad de Chile.
Fotografía: Consuelo Cabrera/ANFP/La Pelota es Mía