Pese a que en varios pasajes dominaron el balón y generaron varias ocasiones en la portería de Campestrini -incluido el gol anulado a Patricio Rubio- en la Universidad de Concepción se mostraron conformes con el desempeño, pese a la falta de concreción de las ocasiones generadas: «Debemos trabajar eso».
La sensación que quedó en la Universidad de Concepción tras el estreno ante Everton en el campeonato nacional fue algo extraña. Por un lado, la conformidad porque en varios pasajes del encuentro se vio que el equipo logró mantener la línea de juego de la última temporada, pero preocupación por la falta de contundencia en el área rival, tras el empate sin goles.
Cristian Muñoz, arquero y figura del encuentro para los del Campanil expuso que «por momentos manejamos bien el balón, intentamos llegar al último tercio donde me parece que ahí tenemos que mejorar la precisión para terminar la jugada. Son cosas que tenemos que ir afinando a medida que vaya pasando el campeonato».
«Por momentos hicimos cosas buenas, y por otros no tanto. Enfrentamos a un rival como Everton que sabíamos que de mitad de cancha en adelante tiene jugadores muy rápidos. En algunas ocasiones ellos aprovecharon esas transiciones para crear peligro», agregó el Tigre.
El capitán y volante Alejandro Camargo, explicó que «lo ideal era ganar, y si bien no nos convirtieron, era lo que queríamos. Si bien tuvimos falencias en defensa, en ataque no tuvimos las mejores decisiones para definir el partido. Hubiésemos hecho la diferencia, pero es algo que tenemos que trabajar».
Respecto a las situaciones del encuentro, particularmente en un tiro de esquina, dijo que «quería jugar rápido y no veo que se pone por delante. Cuando rebota le dije que dejara hacer la jugada de nuevo, el árbitro dijo que le llamaría la atención y nos quitó una posibilidad de poder obtener una ventaja».
Fotografía: Felipe Venegas/La Pelota es Mía