CSD Concepción disputará esta noche, a partir de las 20 horas, el encuentro de ida de los cuartos de final ante Rodelindo Román por la fase final de Tercera «B» en el estadio Ester Roa Rebolledo, con plantel completo.
Llegó la esperada jornada para los hinchas lilas en la temporada. Y es que después de 32 jornadas, CSD Concepción disputará los cuartos de final de Tercera «B» ante Rodelindo Román, una instancia que será de vida o muerte para los ocho participantes de la última etapa de la quinta categoría del fútbol chileno.
Los dirigidos por Esteban González enfrentarán el primer encuentro de la llave en el Estadio Ester Roa, en el que ha se ha convertido, prácticamente, en una fortaleza para los felinos, ya que sólo han perdido en tres compromisos en el reducto penquista. Es por esto, que el «León», aprovechando su localía, buscará dar el primer rugido frente a los santiaguinos, que terminaron primeros en el grupo de la zona centro con 21 unidades en diez cotejos.
En ese sentido, el central Cristian Quintana, dijo a Diario Concepción que «es importante que llegue mucha gente, porque ese es uno de los plus que tiene Concepción. Ellos (Rodelindo Román) no están acostumbrados a jugar con tanta gente. Los fines de semana juegan siempre con 400 o 500 personas. Nunca más que eso. Hay que poner presión y sacar ventaja a nuestra localía, que ha sido una de nuestras fortalezas este año».
Además se refirió al mal momento que vive el cuadro lila: «Es algo que no se puede esconder y a nosotros mismos nos sorprendió cómo se terminó esa segunda ronda. No esperábamos finalizar de esta manera, porque queríamos ser punteros, pero no podemos seguir lamentándonos. Hay que empezar de cero y entrar dispuestos a ganar. No existen equipos invencibles en esta división. Esto es fútbol y Concepción tiene armas para ganar”.
El encuentro entre penquistas y metropolitanos está pactado para las 20 horas de este domingo y se disputará en el Estadio Ester Roa Rebolledo, donde se esperan a diez mil hinchas lilas.
Fotografía: Felipe Venegas / La Pelota es Mía.