Los «Diablos Rojos» han sido uno de los cuadros que más se ha reforzado para el 2021. Así como algunos llegan, otros se van, situación que ocurrió con dos titulares en la campaña de ascenso.

Durante esta semana se confirmó la salida de dos jugadores que se desconocía de su situación en Ñublense. Se trata de David Escalante, quien parte a préstamo por un año a Cobreloa. Por otra parte, Iván Rozas, fue oficializado en O’higgins de Rancagua, a través de las redes sociales del club.

«Chiquito», llega a Calama por petición de Rodrigo Meléndez, DT de Cobreloa, quien dio a conocer que lo quería sí o sí. En el caso de Rozas, el jugador esperó un llamado de Ñublense, pero una oferta la oferta llegada desde Rancagua, sepultó toda opción de seguir en Chillán.

Escalante quería seguir en Ñublense para jugar en Primera División, pero Jaime García no contaba con él. Por lo mismo, llegaron más delanteros como Maximiliano Quinteros, Roberto Gutiérrez y, probablemente, sumará a Nicolás Guerra.

En el puesto de volante, donde jugaba Iván Rozas, el cuadro chillanejo renovó a Luís «Larry» Valenzuela, pero esperaría por otro creador. Además, fue el propio Rozas, quien confirmó que el técnico Jaime García no lo tenía en sus planes para este 2021.

«Estoy muy feliz de llegar a esta institución. Tenía varios ex compañeros que tuve en selecciones menores, así que muy feliz y agradecido del recibimiento de mis compañeros», fueron algunas palabras de Iván Rozas en su presentación en O’higgins.

De momento, Ñublense no ha presentado nuevos refuerzos, pero busca un volante por derecha y un delantero más.

Fotografía: Comunicaciones Ñublense.