Tras conocerse la renuncia de Eduardo Acevedo a la banca del Campanil, desde la hinchada del cuadro estudiantil surgió de inmediato el nombre de Ricardo Viveros para asumir el puesto.
El «Denver» conversó con La Pelota es Mía sobre la actual situación del club. «Acevedo venía haciendo un trabajo correcto y, debido a una serie de cosas, se mermó: expulsiones, lesiones y la seguidilla de partidos. En un equipo corto es complicado. Su decisión de desligarse es algo personal y uno lo debe aceptar», comentó Viveros.
Sobre el plantel «auricielo», el ex goleador de la UdeC señaló que «veo que hay buenos jugadores, pero el equipo es corto y han tenido ese problema de descansos. Ellos son los más convencidos de sacar al club de esta situación«, expresó.
Sobre la opinión de muchos hinchas, quienes tras conocerse la renuncia del técnico uruguayo, pidieron que Viveros asumiera la banca estudiantil, el ex técnico de Nacimiento fue sincero. «Siempre he estado agradecido de ellos por su apoyo incondicional y soy honesto: a mí me encantaría, no lo voy a negar, siempre he querido llegar a dirigir a la Universidad de Concepción. Independiente de lo que suceda, le tengo un gran cariño a la institución, pero no depende de mí, depende de que decidan los dirigentes».
Sobre su relación con la actual dirigencia del club, Viveros dijo que los conoce y «nunca he tenido mala relación con nadie».
El también ex comentarista radial, se atrevió a entregar su receta para salir del fondo de la tabla de promedios. «Ningún jugador va a querer descender, ellos tienen las ganas de salir adelante. Yo les dejaría en claro que tienen la posibilidad de salvar la situación. Son excelentes jugadores, el mensaje debe ser confianza».
Pero el «Denver», a pesar de ser el candidato de la hinchada, también dio un nombre y es «Jorge Pellicer, estuvo en la UdeC y tiene mucha capacidad. Irradia energía y confianza a los jugadores», sugirió Viveros.
Sobre la temporada anterior y el mal desempeño del equipo, en ese entonces dirigido por Francisco Bozán, el histórico analizó que «el equipo venía en una baja intensa y a los jugadores no les llega el discurso. Obviamente Bozán se debió ir antes, pero ya está y hay que afrontar lo que está sucediendo», cerró.