Las pretensiones del Club Deportivo y Social Naval de Talcahuano apuntan a lograr ingresar a la Tercera División pese a la negativa inicial de la Asociación Nacional de Fútbol Amateur (ANFA), mientras que el objetivo de Fernando Rojas es que el club vuelva a las canchas jugando en la Segunda División Profesional.
Luego de intentar fijar dos juntas de accionistas -una ordinaria y otra extraordinaria- con la Sociedad Anónima, las gestiones comenzaron tras una nueva junta de accionistas organizada el 26 de abril del 2018, sin la presencia del -en ese entonces- presidente de Naval de Talcahuano, Fernando Rojas. En dicha asamblea los miembros decidieron de forma unánime que Cristian Ferrada, presidente del CDS, sería el nuevo líder de la Sociedad Anónima. Además se acordó que los derechos federativos de Naval pasarían a manos del Club Deportivo y Social Naval de Talcahuano. Dicha reunión y las resoluciones que allí se tomaron, se encuentran amparadas bajo un acta (Registro Comercial Club Deportivo Naval Sociedad Anónima Deportiva Profesional) realizada por el notario público Omar Retamal Becerra.
En cambio Fernando Rojas (representando a Naval SADP), a través del abogado Óscar Fuentes, presentó una medida cautelar a la justicia ordinaria en contra de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), para que Naval no fuese expulsado del profesionalismo. La resolución se hizo esperar hasta el día 3 de enero del 2019, en el que finalmente la Cuarta Sala de la Corte de Apelaciones de San Miguel acogió dicha medida.
El CDS, quienes actualmente son los que se entienden con la ANFA y la ANFP, presentaron una revocación de poder a Fernando Rojas, es decir, exhibieron ante la justicia los papeles correspondientes para acreditar que Rojas ya no tiene relación alguna con la dirigencia del club. Esto es posible gracias a las resoluciones que se tomaron en la junta de accionistas en donde se escogió como presidente de Naval de Talcahuano a Cristián Ferrada.
Actualmente, Fernando Rojas tiene un plazo de 15 días para responder a la acusación del CDS Naval y, en caso de que efectivamente se le revoque el poder para representar al club, Rojas presentaría una querella criminal en contra del Club Deportivo y Social Naval de Talcahuano, argumentando que “El CDS no es el dueño de la Sociedad Anónima”.