Si bien aún no se define ni el lugar, ni la fecha, ni el horario, el máximo ente rector del fútbol nacional dirimió que se deben jugar los minutos faltantes.
Luego de la suspensión de la Supercopa a falta de pocos minutos del final, por falta de garantías de seguridad, la ANFP determinó que Huachipato y Colo-Colo tendrán que disputar el tiempo restante del partido. Así lo afirmó Pablo Milad, confirmando que lo único que se ha definido por el momento es que el duelo se llevará a cabo sin público.
Un antecedente que vislumbra la carencia de liderazgo por parte de Milad, y el directorio de la ANFP. Las voces de los protagonistas en general han ido en una sola línea, por el lado de Colo-Colo, Arturo Vidal fue enfático y señaló. “La decisión vino de arriba y se lavan las manos. El partido estaba bien. Hay que tratar de manejar mejor estas cosas. Si hubiésemos levantado la copa con ellos, capaz que no hubiese pasado esto al final”. Además, el »King» agregó. «La violencia no le puede ganar al fútbol, era innecesario terminar el partido, da mucha rabia, estas cosas echan a perder el fútbol, pero hay que analizar bien lo que pasó»
Desde la vereda de Huachipato la mirada al parecer no era muy diferente, al ser consultado tras la suspensión del encuentro, el capitán acerero Claudio Sepúlveda, declaró a TNT Sports. «Nosotros queríamos seguir jugando, pero se nos escapa de las manos». En definitiva un nuevo episodio oscuro en nuestro fútbol nacional, que termina una vez más opacando lo verdaderamente importante, el juego y la instancia de reunión para la fanaticada.
Fotografía: Huachipato FC.