La crisis del arbitraje es una tormenta en crecimiento. A las ya conocidas críticas por el actuar en la cancha, se suman los problemas administrativos.
Solo bastó el despido de Patricio Blanca, Omar Oporto y Raúl Orellana para que estallara la bomba que principalmente acusa de irregularidades a los directivos del Sindicato, Johnny Harasic y Claudio Aranda, tal como lo señaló uno de los despedidos a La Pelota Es Mía, pero al parecer el tema ahora irá más allá.
Una de las medidas que tomó el arbitraje fue aprobar un voto de censura contra la directiva sindical. »Se busca transparentar todo lo que se ha realizado durante el periodo del señor Harasic (presidente), el tesorero Claudio Aranda y del secretario Rodrigo Brevis. Según los estatutos del sindicato se deben transparentar los gastos realizados y censurar al sindicato», afirmó Omar Oporto.
Nuevas denuncias
Entre los nuevos antecedentes se encuentran «la no designación oportuna de árbitros para un duelo amistoso (Iquique – San Marcos) y para dos duelos del torneo de Fútbol Joven». En este caso las acusaciones caen sobre Paola Barría, instructora técnica del área.
Además, acusan al preparador físico, Francisco Caamaño que «ha expresado diversas opiniones que denostan la condición femenina de las árbitras». Según se indica en el comunicado, la situación fue advertida a la comisión sin obtener respuestas.
Prometen medidas extremas
Finalmente, en el mismo comunicado, el Sindicato solicitó de forma urgente la renuncia de Javier Castrilli y de los miembros de la comisión integrada por: Osvaldo Talamilla, Braulio Arenas, Paola Barría, Patricio Basualto y Francisco Caamaño. De lo contrario anunciaron que este martes se realizará un asamblea donde se votará una posible paralización de funciones.
Fotografía: Campeonato Chileno