El cuadro lila no pudo remontar la mínima desventaja, que le permite al azulgrana regresar con los 3 puntos. Los locales están a un punto del descenso y con el Tiburón Ramos con pie y medio fuera de Nonguén.
No levantan cabeza. No hay otra forma de resumir el pésimo momento deportivo por el que está pasando Deportes Concepción, que ante Iberia fue de menos a más tras un primer tiempo paupérrimo. Los de Los Ángeles, por otra parte, jugaron un correcto partido y, sin brillar, ratificaron por qué son uno de los equipos más contundentes del campeonato.
El primer tiempo fue un monólogo de Iberia. Renato Ramos nuevamente planteó de pésima manera el duelo y los pupilos de Eduardo Lobos hicieron figura al portero de Deportes Concepción, que aguantó lo que pudo hasta que a los 43, Luis Oyarzo anotó el único gol con el que Iberia logró hacerse con los 3 puntos.
El segundo tiempo, Deportes Concepción creció muchísimo. Los lilas, sabiendo que solo les sirve ganar, salieron a buscar el partido y se encontraron a un Iberia algo más dócil, no así más débil. El León lo buscó y hasta se encontró con el palo en el final. Sin embargo, la victoria quedó decretada para los de Eduardo Lobos.
Realidades adversas
El triunfo le cae como anillo al dedo a Iberia, que con estos 3 puntos sigue en pie de guerra en búsqueda del codiciado ascenso al Ascenso, quedando segundo y a dos puntos del puntero absoluto, que es Deportes Recoleta. El azulgrana, además, goza de un excelente presente deportivo, sumando 20 goles a favor y apenas 11 en contra.
La realidad lila, eso sí, es completamente adversa. En Nonguén se vive una pesadilla y el peligro de descender nuevamente al amateurismo se ve cada vez como una posibilidad más factible: solo tienen 10 puntos de 36 posibles y están a una unidad de la zona de descenso directo. Y, al parecer, el buque necesitaría un nuevo nombre a cargo del timón, pues el Tiburón Ramos camina por la cuerda floja para mantenerse como entrenador de Deportes Concepción y solo un milagro le salvaría el puesto.
Foto: Bárbara Muñoz / La Pelota es Mía