Los acereros se presentaron ante Unión Española con un equipo completamente alternativo para resguardar sus mejores armas para la final del domingo ante Santiago Wanderers e igualaron 1-1. El pésimo arbitraje de Francisco Gilabert fue una vergüenza.
Huachipato y Unión Española animaron un entretenido empate 1-1 en el Estadio Santa Laura, válido por la ida de cuartos de final de la Copa Chile. Los de Luvera se fueron al entretiempo con la ventaja mínima, que Unión Española supo equiparar en la primera fracción del complemento.
La apertura de la cuenta fue obra de Claudio Torres, que cerró un gran contraataque con un zurdazo. El gol habría estado invalidado en caso de haber VAR, pues el jugador acerero recibió en offside. Otro error arbitral para la colección de un nombre con pésimo repertorio como lo es Francisco Gilabert. Irónicamente, no fue el único del partido.
El empate de Unión Española llegó apenas a los 10 minutos de la segunda mitad, cuando Conelli batió con un zurdazo a Parra, que fue capitán. El gol también debió haber sido invalidado, pero Gilabert ignoró una escandalosa mano (una de 3 más que no cobró) que era penal a favor de Huachipato. El contraataque de esa jugada derivó en el empate.
El resto del partido estuvo marcado por una serie de llegadas, pero lo más relevante siguió siendo el asqueroso arbitraje que protagonizó Francisco Gilabert, que tomó decisiones inentendibles y no cobró penales para ambos lados que no tenían como no ser cobradas. Que sirva de evidencia de como el pésimo arbitraje chileno se acostumbró a depender del mal uso de una herramienta como el VAR.
La vuelta será el próximo miércoles. Huachipato, en tanto visita este domingo a Wanderers en un partido que es indispensable ganar para soñar con la salvación.
Foto: Comunicaciones Huachipato FC