Tras un año y medio en Ñublense, el volante será nuevo jugador de Deportes Puerto Montt y conversó en exclusiva con «La Pelota es Mía» sobre su paso por Chillán y su nuevo desafío.
Alexander Corro llegó a principios del 2019 a Ñublense, cuando estaba al mando Germán Cavalleri. En un comienzo, era titular indiscutido y capitán del equipo, situación que, tras la partida del DT argentino, cambió drásticamente y terminó no siendo considerado por Jaime García, ni siquiera para el banco de suplentes. En las próximas horas viajará a Puerto Montt para afrontar su nuevo desafío en un club que también quiere el ascenso.
– ¿Cómo calificarías tu paso por Ñublense?
– La verdad que la calificaría positivo, porque el año pasado, sino hubiese sido por el estallido social, nosotros éramos candidatos a pelear el ascenso, pero después jugamos la liguilla, en la cual no fui parte, cuando el año anterior yo la había jugado con Cobresal y la habíamos ganado. Arranqué en Ñublense siendo titular con Cavalleri y después con la llegada de Jaime García ya lo dejé de ser, pero siempre me mantuve apoyando y remando desde donde me tocó. Soy un profesional de esto y, a pesar de que el técnico no me tenía en consideración, nunca bajé los brazos y nunca dejé de entrenar para ganarme un puesto y volver al 11.
– ¿Qué sensación te deja tu último período en el club?
– Me deja un poco de sensaciones encontradas porque ahora me voy con el equipo puntero, pero con la consciencia tranquila de que, desde mi parte, di todo. Estuve esperando la oportunidad, a veces la gente te hacía saber que en algunos partidos hacía falta un contención, pero el que toma la decisión es el técnico y había que respetarlas. Por suerte me salió la oportunidad de partir a otro equipo que también va a pelear por cosas importantes, así que contento por este desafío que me toca afrontar. Trataré de dar lo mejor de mí, como siempre, y lograr mi segunda ascenso acá en Chile.
– ¿Te gustaría tener una revancha en Ñublense?
– Sí, me gustaría tener una revancha acá en Ñublense, porque me voy con el equipo puntero, el año pasado lo mismo. Los años anteriores el equipo venía peleando abajo y, desde que llegó esta camada de jugadores, hemos peleado arriba. Así que sí, me hubiese gustado tener más participación en estos últimos partidos, ser más importante, pero me tocó apoyar desde atrás y tratando de aconsejar a los muchachos que estaban jugando y a los más chicos. Me encariñé con la gente, con la ciudad y me llevo muy lindos recuerdos. Me gustaría volver el día de mañana, si se llega a dar la oportunidad.
– ¿Qué mensaje de despedida le darías a los hinchas de Ñublense?
– Gracias por el apoyo y los mensajes de cariño. Dejo muchos amigos acá en la ciudad. Estoy deseándoles lo mejor, tienen una gran hinchada y un equipo que tiene que estar en primera tranquilamente porque están a la altura. Ese es mi deseo para la gente que nos estuvo apoyando. Cuando se enteraron de que voy a Puerto Montt, me han deseado lo mejor, lamentando que me iba porque sentían que hacía falta en el equipo, pero deseándome lo mejor.
– ¿Cómo proyectas tu nuevo desafío en Puerto Montt?
– La verdad es que hay un muy buen plantel, hay un lindo equipo que va a pelear por cosas importantes. Estoy contento de afrontar este desafío, yo creo que vamos a dar pelea y espero amoldarme rápidamente al nuevo grupo, a lo que requiere el cuerpo técnico y a dar lo mejor como siempre para pelear arriba».
En las próximas horas, el volante argentino viajará hasta Puerto Montt para sumarse a las órdenes de Jorge Aravena, tras una temporada y media vistiendo la camiseta de los «diablos rojos».
Fotografía: Comunicaciones Ñublense.