Huachipato del argentino Nicolás Larcamón se presentó en cancha con un 1-4-2-3-1. Respecto al último encuentro frente a Antofagasta en el norte, Larcamón optó por dejar a José Bizama de central junto con Valber Huerta. En medio campo dejó un doble cinco, conformado por Leonardo Povea y Claudio Sepúlveda. Jimmy Martínez quedó como volante ofensivo.
Los movimientos defensivos fueron variados. El equipo sureño intentó salir jugando desde el fondo con una serie de variantes que permitían a los laterales poder sumarse en ataque. Combinaciones entre laterales, volantes y punteros, eran la forma de mostrar poderío en ofensiva. Por el lado derecho, Joaquín Verdugo se introducía en el centro del campo para dejarle espacios libres a Juan Córdova. Por el lado izquierdo, Claudio Sepúlveda cubría una y otra vez la posición que dejaba Gutierrez para ir ataque en cada jugada.
El trabajo defensivo fue muy importante en medio campo. Huachipato robó el balón en el lugar que más le convenía. En cada lateral o juego por las bandas de Temuco, juntó mucha gente para tener más efectividad en la recuperación de la pelota. En cada uno de esos robos, participaban el lateral, el puntero y dos de los tres volantes. Esto generaba una superioridad numérica.
Mucha participación en ataque. Laterales fueron constantes opciones para generar y ganar espacios. Joaquín Verdugo y el venezolano José Caraballo hicieron muchos movimientos para generarle opciones de pase a los volantes. La clave del equipo de Larcamón fue plantar muchos hombres en ataque, con la idea de que los jugadores se encontraran con varias opciones de pase en el área rival.
AUTOR: FELIPE BORDA / TWITTER @FelipeBorda
FOTOGRAFÍA: CARLOS ÁVALOS / LA PELOTA ES MÍA