Este lunes, los presidentes de los clubes del fútbol chileno determinaron la reanudación del torneo siempre y cuando las condiciones sanitarias del país permitan el retorno a las canchas. Se proyecta que tanto el Fútbol Joven como Femenino no compitan por los puntos este año, y realicen competencias de desarrollo por zonas durante el segundo semestre. Segunda División sigue siendo un misterio. 

Y hubo definiciones. Pocas, pero hubo. Este lunes, el Consejo de Presidentes de la ANFP sesionó de forma virtual para abordar los pasos a seguir frente a una posible vuelta del fútbol competitivo, en medio del avance del coronavirus.

Es así como se aceptó la propuesta de la comisión Retorno al Fútbol, y se decidió que tanto el torneo de Primera División como de Primera B volverán el 31 de julio y 1 de agosto, siempre y cuando las condiciones sanitarias lo permitan.

En un comunicado publicado a última hora, la ANFP señaló que «los clubes además acordaron que considerando la situación de excepcionalidad en la que se encuentra nuestro país y el fútbol profesional en particular, los clubes dispondrán de un mínimo de 4 semanas de entrenamientos en un escenario ideal previo al comienzo de los campeonatos, plazo que en ningún caso podrá ser menor a 3 semanas».

La idea es que ese fin de semana se jueguen los duelos pendientes tanto de Primera A como Primera B, que no se pudieron jugar el fin de semana del 14 y 15 de marzo pasado. En ese fin de semana tanto Huachipato como Universidad de Concepción y Ñublense si pudieron jugar sus partidos (en el caso de los chillanejos, recibieron a Valdivia sin público el 16 de marzo), por lo que la vuelta de nuestros elencos a las canchas sería recién el fin de semana del 7-8 de agosto, si las condiciones lo permiten.

Caso especial sería el de Huachipato, que aún tiene un partido pendiente contra Coquimbo Unido por su participación en la Conmebol Sudamericana. Dicho encuentro podría jugarse en el primer fin de semana de vuelta a la competencia.

Además se contempla una medida de Fair Play para todos los elencos que tengan problemas en retomar sus intertemporadas, que significa que si uno o más se retrasan, lo mismo ocurrira con el reinicio de los partidos.

¿Y Segunda División? Pese a que la posición inicial del directorio y el consejo es que el campeonato se suspenda por la dificultad que significa que las tres categorías jueguen al mismo tiempo, se realizarán una serie de reuniones esta semana para definir posiciones, luego de que los dirigentes del ascenso exigieran que se vuelva a jugar.

Un elemento clave será determinar si la ANFP apoyará a los clubes, entre ellos Fernández Vial, Deportes Concepción e Iberia, a nivel económico para solventar los meses venideros. Si no es así, el torneo finalizará sin haberse jugado y los clubes deberán terminar el año sin competencia. La definición estará recién la próxima semana.

¿Fútbol Femenino y Joven? La opción que corre con ventaja es que ambas competencias se suspendan hasta 2021, y que el segundo semestre jueguen ligas de Desarrollo (a nivel zonal en el Fútbol Joven y un torneo de Transición para la Primera División Femenina), con el fin de que mantengan el ritmo competitivo.

Es así como va dilucidándose como será el futuro del campeonato nacional, donde pese a la intención de competir, la definición no será tomada necesariamente en Quillín. Serán los informes epidemiológicos los que determinen si es factible volver a las canchas.

Fotografía: Bárbara Muñoz/La Pelota es Mía