En el programa «Pandemia Forera» habló sobre su paso por el elenco auricielo desde 2015, donde hoy es capitán y analizó como el elenco universitario pasó de pelear el titulo y jugar Libertadores, a pelear el descenso.
El mediocampista nacionalizado chileno, debutó el año 2007 en Godoy Cruz de su natal Mendoza, ya en el 2011 le tocó jugar el ascenso con Sarmiento de Junín (Cuarta división). Durante el año 2016 fue nominado al premio Puskás de la FIFA, por su gol de mitad de cancha a O’Higgins.
Dentro de los equipos que militó en el fútbol nacional, destacan sus pasos por Lota Schwager, Curicó Unido y ahora, en la UdeC. Donde cuenta con 155 partidos jugados, 5 goles y 102 capitanías, siendo el tercero en el podio de jugadores históricos junto a Fernando Solis, Rodrigo Raín y Gabriel Vargas.
Camargo contó a la audiencia que, junto a su señora Anita serán padres por segunda vez. Incluso Ronald De La Fuente, ex jugador de la UdeC, que se encuentra de paso en la zona, le ofreció cuidar a su hija mientras ambos se preocupan del parto.
DESDE CORONEL AL CAMPANIL
Durante el año 2013, Alejandro Camargo llegó Lota Schwager. Venía de jugar en la Cuarta categoría del fútbol argentino y contó que hasta ese entonces él editaba compactos con sus jugadas y las ofrecía a representantes, hasta que uno de ellos lo presentó en el cuadro minero. La sorpresa fue cuando llegó club y se enteró que estaría a prueba. Recién firmó su contrato cuando Deportes Concepción tuvo intenciones de ficharlo para esa temporada.
Una de las anécdotas que vivió en el cuadro de la lamparita fue cuando un hincha llegó a un entrenamiento con pan minero. “Esos son los lindos gestos que uno sabe valorar”, agregó.
Mientras que en la temporada 2014-2015, Camargo jugó el torneo de Primera B en el cuadro de la región del Maule y agregó que “era un club que estaba de mitad de tabla para arriba y en el correr de los partidos se notaba que la gente era cariñosa”.
En el 2015 llega a una Universidad de Concepción que venía de ganar la Copa Chile y se disponía a jugar el Campeonato Nacional y la Copa Sudamericana: “Había muchas figuras, estaba el ‘Tigre’, Vargas, Roco y un montón de jugadores que saqué lo mejor de ellos durante todo ese tiempo. Aparte se siente que hay cambio, en la ‘B’ se pega mucho, hay más roce. En Primera División no es tanto eso (…) Llegar a Primera y jugar Copa Sudamericana la verdad que fue algo lindo, me acuerdo de casi todos los partidos”.
-¿Con quién tenías mayor relación en el club?
-Me llevaba bien con todos, con el ‘tigre,’ Ronald De la Fuente, Benítez, Voboril, Vadalá, varios.
Sobre el gol de mitad de cancha a O’Higgins, que le permitió ser nominado al Premio Puskás de la FIFA, comentó que «cuando le pegué, yo pensé que se iba por arriba del travesaño, pero cuando empieza a bajar y el arquero no llegaba al arco ya empecé a gritar porque no lo podía creer (…) El técnico en ese momento era Bozán y nos había dicho que el arquero jugaba adelantado. Bueno y con el ímpetu de querer ganar por la posición en la que estábamos y para cerrar el partido decidí pegarle, si entra, entra o sino bueno y justo entró. Un gol inolvidable”.
Además dijo que «me llamaron de todos lados, incluso me hacían notas en el departamento, cosa que nunca lo había vivido, fue un momento lindo y lo disfruté como tal. Después yo decía, si me llegan a nominar para ir a la entrega del premio, buenísimo, pero con el solo hecho de estar nominado para mí era un montón”.
DE LA ZONA ROJA A LA CONQUISTA DE AMÉRICA
Luego de la temporada 2017, que llevó a la definición con Unión Española para jugar pre Libertadores, llegó el año 2018 donde la UdeConce estuvo muy cerca de lograr el campeonato.
“Me acuerdo de las primeras fechas que empezamos mal, ese partido con Huachipato que perdimos, pero decidimos entre nosotros hacer charlas con el técnico y en el siguiente partido logramos ese punto de quiebre con Unión Española, de visitante, que logramos ganar con gol de Sergio Vittor. Esos eran los puntos que necesitábamos para motivarnos salir adelante, luego le fuimos agarrando la mano al equipo y a los compañeros (…) Después le agarramos el gusto a ganar y era cosa de ir a cualquier cancha y sabíamos que íbamos a ganar y eso fue lo que nos hizo ganar 10 partidos seguidos”, comentó.
-¿Existía en el camarín esa visión de pelear el titulo o era de verdad eso del “paso a paso”?
-Era el paso a paso, el profe Bozán nos mantenía siempre enfocados en lo que queríamos, obviamente uno pensaba en salir campeón, pero no teníamos que subirnos a una moto porque no sabíamos lo que iba a pasar.
-Hoy, con el paso del tiempo, ¿crees que esa decisión, del paso a paso, fue la correcta?
-Yo pienso que fue la mejor idea del profe porque dentro de la cancha están las equivocaciones y los errores de nosotros y eso fue lo que nos pasó la cuenta.
-¿Cuánto afectó la partida de Jean Meneses a mitad de torneo?
-Es un gran jugador, se fue y costó agarrar la mano en ese puesto, pero está bien lo que hizo. Se fue en el momento justo para él, no para nosotros. No se le reprocha nada, lo felicito.
-¿Cuál fue el factor del equipo (en el 2018) para aguantar la presión y pelear el campeonato?
-Primero la calidad de jugadores que teníamos, después saber llevar al grupo por el camino que se tenía que llevar. Quizás no éramos todos amigos, pero sabíamos por donde tenía que ir este barco. Logramos agarrar ese gusto a ganar y cuando todo sale bien a uno le da gusto trabajar y la competitividad en el plantel es mucho más. Todo ese conjunto de cosas y competición sana permitió lo que se logró, la unión del grupo”.
El cierre del año 2018 sin duda fue exitoso, donde la Universidad de Concepción conseguía por segunda vez ir a la fase de grupos de la Copa Libertadores. Donde, tras conocer el sorteo, le tocaba jugar con Olimpia (Paraguay), Sporting Cristal (Perú) y Godoy Cruz (Argentina), club de origen del capitán auricielo.
-¿Cómo fue jugar esa Copa y la preparación?, ¿Quedaron conformes?
-Fue una experiencia linda, el saber que íbamos a jugar. Uno veía las promociones en la televisión donde salía la Universidad de Concepción y el logo de la Copa Libertadores y eso a uno lo enorgullece mucho. Uno se preparaba desde el inicio de la pretemporada para jugar no solamente eso, sino que el torneo también. A raíz de todo el esfuerzo que hizo todo ese grupo, fue que vieron grandes jugadores, de nombre. A la hora de jugarla, sí, lamento varios partidos donde podríamos haber sido más inteligentes y haber cerrado partidos lo antes posible, porque en esa clase de partido tienes que estar muy al detalle y eso nos pasó la cuenta. Fue una gran experiencia para el club y todos los jugadores que estábamos en ese momento y al que le toque vivirlo de nuevo, no cometa los mismos errores”.
El comienzo del 2019 fue muy auspicioso, si bien se perdieron jugadores, también llegaron nombres como Patricio Rubio, Nicolás Maturana, Germán Voboril, entre otros. Con un partido frente a Sporting Cristal, que dio la vuelta al mundo, y luego tocó enfrentar a Godoy Cruz (equipo donde debutó).
«Fue algo lindo, en el club actualmente no hay jugadores que tuve de compañeros, pero traía recuerdos de cuando debuté. Actualmente están los médicos, kinesiologos y utileros, con ellos me hablé mucho, pero a la hora de jugar era la UdeC siempre”, dice.
-¿Qué cambios notabas en la intensidad de los partidos?, Al estar jugando una competencia de nivel superior ¿uno se predisponía a hacer un esfuerzo mayor o también había un cierto nivel del equipo contrario que te exigía en un mayor porcentaje?
-Hay muchos factores, al estar jugando una competición internacional en el camarín se siente un ambiente diferente, cuando te estás cambiando viene el árbitro que es extranjero y empiezas a sentir ese ambiente lindo de querer jugar. Ya en la hora del partido enfrentas a jugadores que tienen muchas más experiencias que uno, que tienen más partidos internacionales y que quizás son más valorizados. Es una mezcla de todo, se exige mucho y esos son los factores que son totalmente distintos al torneo local.
-A pesar de todo, la UdeC terminó última de su grupo, uno muy disputado y que en la última fecha tuvo la posibilidad de clasificar a octavos de final. ¿Sientes que el equipo estuvo a la altura de la competencia?
-Más tirando a no que sí, porque dejamos pasar varios partidos la chance de ganar o quizás de empatar, empates que en estos torneos te ayudan a pasar de fase o clasificar a una Sudamericana. Incluso ese partido que ganamos 5-4 está bien, lo ganamos, pero llegando al camarín estábamos calientes porque nos hicieron 4 goles, la idea era ganar, pero sin que nos hicieran goles.
LA CRISIS DEL DESCENSO
Camargo también hizo énfasis en que la campaña de la Libertadores no afectó el ánimo del plantel «sino que no supimos sobrellevar las dos competiciones o quizás habría que haber llevado el torneo local de otra forma, pero bueno, no lo supimos hacer (…) son cosas que se aprenden, ya sea de nosotros como el cuerpo técnico, pero son cosas que se tienen que aprender”.
Ya en el segundo semestre del 2019, la Universidad de Concepción se encontraba estancada en puestos de descenso, con grandes nombres como Rubio, Orellana, Rabello, Ballón (que venía de jugar Copa América con la Selección peruano) pese a eso el equipo no podía salir de esa zona.
Sobre ello, Camargo dijo que «lo psicológico también juega en contra, no supimos consolidar la buena clase de jugadores que teníamos. No supimos complementarnos, cometíamos errores (…) Estando abajo es difícil, no logramos tener regularidad. Queríamos salir hacia adelante, pero es difícil, pero cada uno lo asimila de forma diferente».
Fotografía: Carlos Ávalos/La Pelota es Mía